La cardiología me ha dado la oportunidad de escuchar a los mejores del mundo, he tenido la suerte de estar en los mejores congresos, en Estados Unidos, Europa, Australia, he estado en más de 30 países y Tuve el gusto de ver y escuchar a los autores de los libros en los cuales estudié.
¿Qué mayor satisfacción puede tener un profesional que estar frente a los mejores ?Aprender, aprender y aprender es la consigna.
El año pasado en Suecia, tuve la oportunidad de escuchar a uno de los más grandes Dr. Valentin Fuster, dando una conferencia que cambio definitivamente mi modo de pensar como médico.
Es que hoy en día sabemos cosas que hace un año no sabíamos, todo va muy rápido, el conocimiento científico es como un tren bala, debemos subirnos a él o estaremos perdidos pero, si nos subimos y viajamos en el conseguiremos cosas por nuestros pacientes que antes eran inimaginables. Hoy me referiré una de esas cosas: La fuente de la juventud. Creo que todos queremos vivir 90 o hasta 100 años pero ¿Cómo llegaremos a esa edad?
¿Cómo estaremos de cabeza si llegamos a esa edad? Ejemplo veo los exámenes de un paciente y le comento “La felicito va a vivir 100 años”. La paciente comenta:” Ay no doctor, no quiero vivir tanto, no quiero ser una carga para la familia”.
Creo que ahí está el tema, hoy en día, no solo sabemos que es lo que pasa, porque el deterioro de la memoria y de todas las funciones básicas, sino además, estamos en el buen camino para evitarlas. Un día un paciente de 92 años me dijo una frase: “Lo que pasa doctor, es que no me llega agua al tanque”.
He ahí el tema, la demencia multi infarto es eso, por alguna razón la sangre que debe llegar a los diferentes sectores del cerebro no llega, lo va deteriorando poco a poco llevándolo al estado que vemos habitualmente en los viejos que empiezan con pérdida de la memoria reciente (¿Qué comí ayer?) pero se acuerdan lo que paso en 1935, hasta el deterioro total donde no conocen y a su hermano.
Una frase que me quedo grabada de la conferencia del Dr. Fuster fue que el paciente siempre dice “a mí no me va a pasar” refiriéndose a los infartos cerebrales, y el médico le contesta: “A ti no te va a pasar pero no conocerás a tu hermano”. Se produce con la caída de la circulación a nivel cerebral micro infartos, esto va llevando a las neuronas como a un suicidio (apoptosis) no debemos olvidar que las neuronas no se reproducen y lo que se pierde no se recupera, es decir, debemos imaginarnos grandes terrenos baldíos en el cerebro, ¿se lo imaginan?
Ahora ¿Cómo evitar que esto pase?
La fuente de la juventud.
Yo creo que la juventud está en la cabeza, en la actitud y en la aptitud frente a la vida entonces, lo único real es que si no cuidamos algo tan preciado como nuestro organismo este no tiene repuesto.
Imaginemos que compramos un auto O km, no le hacemos el service, lo tratamos mal, nos olvidamos de cambiarle el aceite, etc. Ese auto a los 50 000 km nos va a dar problemas, capaz que no funciona más, la diferencia es que el auto se cambia, nuestro organismo es lo único que tenemos.
Si realizamos actividad física reglada, nos alimentamos correctamente, mantenemos un peso acorde a nuestra edad, y combatimos todos los factores de riesgo con los medicamentos adecuados estaremos evitando la enfermedad vascular: estaremos evitando el dicho de mi paciente “Que nos llegue agua al tanque”.
La juventud es para mí: tener 90 aós y la mente de 50, sabemos que esto se puede lograr, debemos entender que la fuente de la juventud ya está al alcance de nuestras manos, no es fácil realizarlo pero el premio es enorme. Tal vez éste libro lo que buscó fue eso, educar, ayudar al paciente a entender, en un idioma que pueda manejar, lo más importante es saber defenderse, pues tenemos las armas solo debemos saber usarlas para ganar lo que parecía ciencia ficción. ¡La fuente de la juventud!
Del libro: “Papá se enfermó del corazón”.